miércoles, 28 de marzo de 2012

Perfil, Siempre agradezco el cambio: Luis Albeiro Sepúlveda Acevedo


Perfil
Introducción: Luis Albeiro Sepúlveda Acevedo, un señor que vive en un barrio de Medellín hace mucho tiempo, en dónde parte de su vida ha estado ligada a acompañar a sus tantas enfermedades y satisfacciones.
Siempre agradezco el cambio: Luis Albeiro Sepúlveda Acevedo
Nacido el 24 de julio de 1964, a sus 48 años de edad, hoy en día permanece en las vidas de muchas personas, quienes a cada instante le hacen saber lo orgullosos que se sienten de conocer un ser tan único y diferente a todos. Luis es un hombre que a pesar de conocer los límites de la muerte, del final, la frontera que hay en dónde se es posible pasar a la nada; tiene muchas ganas de lograr un sinnúmero de retos y metas, que si no fueran por la segunda oportunidad que le dio la vida sería imposible desearlo. Un paracaidista militar y soldado anti guerrilla graduado hace 23 años seguramente no se hubiera imaginado que le sucedería tal hecho, de llevarlo a visitar por un largo tiempo las habitaciones de un espacio blanco, tranquilo y silencioso llamado hospital y mucho menos estar hoy pisando tierra firmemente. Cuando se habla con él, inmediatamente piensas en la capacidad de superación que posee y la hermosa manera de vivir lleno de alegría y aferrado al constante mejoramiento tanto personal como físico. A medida que observaba los recuerdos que la vida le ha marcado en su cuerpo, él señala abiertamente una experiencia que tuvo durante su adolescencia y de la que asegura sentirse orgulloso de contarla, y es el largo tiempo que anduvo bajo las drogas por aproximadamente 24 años, pero que a su vez dice: “Yo no tuve vida, hermano”, es ahora cuando notablemente se construyen infinidad de cosas positivas y que le aportan a su calidad de vida.
En el barrio Belén las Playas es conocido como un señor admirable, una persona sociable, carismática, difícil de pasar desapercibido un saludo de él hacia los demás; alguien muy alto, barrigón, alegre, con pelo blanco, enmarcado por una masculinidad muy particular y una manera de ser transparente y con una facilidad de perfectamente hacer parte de tu vida, ser mas que un vecino, un amigo más.
Ese ilustre señor desarrollo varias situaciones en su vida desencadenadas por episodios que gracias a Dios, no fueron obstáculo alguno para existir hoy día en este mundo, el 23 de diciembre de 1999 los 13 tiros que le propiciaron hace 13 años, causaron la estadía por más de 4 meses en coma, estando su vida a punto de desvanecerse; por una venganza que algunos tenían con un sobrino de él, secuelas como tener una prótesis en su ojo izquierdo, dificultades motrices en sus manos y tantas huellas en su piel de impactos de bala que adornan su cuerpo y le recuerdan por siempre la gran oportunidad que le dio la vida y que acota Luis con total seguridad: “hijo, eso es un regalo de Dios”, el acompañamiento de su familia durante ese período y actualmente, le sirve de mucho para salir adelante y escribir nuevas páginas en su vida llenas de logros y trazadas con sentimientos vívidos y éxitos palpados.
Diciéndome: “mijo, ¿si le está quedando bien la tarea?”, podía seguir conociendo más aun de este personaje viviente; además de leer constantemente libros religiosos, periódicos y cualquier otro tipo de lectura, decía que su gran sueño es estudiar ingeniería mecánica y también se sentía orgulloso de informarme la existencia de su hija que se llamaba Ginna, ya que le cambiaron el nombre, además de el nacimiento del hijo de ella, si ya le podían llamar “Abuelo”.
Luis se arrepiente de haber desperdiciado tanto tiempo de su vida en la drogadicción, no hacer las cosas que sentía en ese momento y dejarse llevar por las malas amistades, amigos que algunos están lejos y otros que habitan el extraño mundo de la muerte.
Sufriendo de ataques epilépticos, es un sabio de la prevención, por tanto me dice que es extremadamente juicioso con sus medicamentos y también recuerda a dos seres queridos que describe como personas irremplazables: sus Padres.
Causando gran curiosidad le pregunte: ¿le gusta el alcohol, fumar? a lo que respondió: “No, pero si meto. risas”, escuchando esta respuesta inmediatamente le dije: ¿tiene novia? Y me dijo: “No, las mujeres pagan muy mal, no, son sino conchudas”.
Asistiendo a un grupo de rehabilitación dictado en la Unidad Deportiva María luisa Calle, Luis comparte muchas cosas de su vida con sus compañeros y resalta la gran labor que realizan por él, en pro de su constante motivamiento por una mejor calidad de vida, dice que: “él percibe que la gente lo observa con respeto, que le hacen saber el apoyo de ellos y lo felicitan por las ganas que viven en su corazón de realizarse como una mejor persona”
Observaba el tatuaje que habita en la piel blanca de Luis, mas exactamente en su hombro y brazo que sin duda representa algo en su vida, me dijo: “Es un recuerdo de todo lo que viví en la armada”.
Seguramente la vida le ha demarcado a Luis un camino por dónde puede dar cada paso sin afán, pero con la total confianza de que a medida que avance, avanzaran las ganas y crecerán los resultados que finalmente magnificarán su presencia en su casa, en su familia, en su barrio y en su corazón mismo.
“Mijo, ¿cómo va con la tarea?, ¿ahí si ve bien?: Luis Albeiro Sepúlveda Acevedo.

miércoles, 21 de marzo de 2012

Descripción: tres momentos felices de mi vida.

Durante toda mi vida han pasado episodios, vivencias, experiencias muy significativas y que hasta el día de hoy me han hecho crecer como persona. Pero sin duda alguna al recordar los momentos más relevantes de mi pasado me atrevo a decir que son:
El nacimiento de mi hermanito:
Un recuerdo en dónde sentí una inmensidad de emociones por saber que iba a tener un amigo de sangre, un compañero, un confidente, un hermano; sentía una total felicidad y se lo hacía saber a mi madre, puesto que estaba dispuesto a recibirlo con el mayor amor del mundo, y más aun sabiendo que venía en camino una personita muy única, un angelito muy especial y a él que decidimos nombrarlo Emmanuel.
Mi primera comunión:
Recuerdo que ese día me sentía muy especial, pues la mayoría de mi familia tenía puestos los ojos en mí; había un pastel muy grande con forma de biblia, que a propósito comí mucho ese día. Definitivamente un encuentro con Dios muy agradable y satisfactorio.
Mi graduación del colegio:
Cuando pienso en mi graduación, inmediatamente recuerdo que fue una vivencia llena de muchos sentimientos encontrados, alegrías, tristezas, tranquilidad, confianza. Sabía que aunque había culminado un ciclo muy importante de mi vida, pues era consciente de la distancia que se toma muchas veces de tus compañeros, amigos, personas a las cuales les cogiste un enorme aprecio y cariño. Ese día estaba listo, con una toga azul oscuro, precisamente mi color favorito y con uno de mis más grandes regalos, mi familia.


miércoles, 7 de marzo de 2012

Descripción de una casa.

Existe una casa grande, llena de vivencias, recuerdos, situaciones, esta cubierta por una fachada de color café, en algunas partes más intenso que en otras.
Por ejemplo su techo tiene varios pedazos que parecen acabados de pintarse esta posee tres ventanas laterales las cuales tienen diferentes momentos, en la primera se observa una silla en donde descansa una persona, apenas recubierto por una luz amarilla de fondo, pasando a ver la siguiente ventana nos damos cuenta que hay una mujer asomada pensando en quizás visitar a la felicidad, y por ultimo al lado de ella está la próxima ventana en donde hay unas cortinas entre cerradas que permiten divisar una luz tenue y brillante de color amarillo
Por supuesto esta casa tiene una puerta ovalada por dónde entran las tristezas, alegrías, desamores, personas, sentimientos, pintada de color ladrillo y bordeada por un tono más fuerte; para llegar a esta casa se pasa por un camino conformado por una gran cantidad de rocas negras y grises que sienten en cada paso la intriga que traen los visitantes por conocerla.
A ambos lados de la casa hay árboles grandes y pequeños, con hojas muy verdes, tallos gruesos y sombreados por una gama de color marrón que ambientan el entorno, así como están también acompañados por un cielo bañado de varios matices , blancos, azules, grises y morados que iluminan y dan vida a la casa donde todos ustedes son bienvenidos.